Viajar a Irlanda: "Día 1: de Dublín a Kilkenny"


Después de recoger nuestro vehículo y, previa a una planificación, ya teníamos nuestro primer destino: las montañas de Wicklow, justo al sur de Dublín. Allí nos esperarían Powerscout Gardens y Glendalough. Para ello utilizamos dos sistemas de navegación: un mapa de carreteras de Irlanda de la Guía Michelin y el GPS del dispositivo móvil. Antes de llegar a estos dos destinos realizamos una parada previa en la plácida e idílica aldea de Enniskerry, asentada en una colina, donde tomamos provisiones para nuestro largo recorrido.

Powerscourt Estate

Partimos desde aquí hacia la casa y los jardines de Powerscourt, situados justo al sur del pueblo. Se llega ascendiendo por la carretera principal y dejando la plaza mayor a la derecha; su salida está bien señalizada. Aunque la propiedad es del año 1300, la mansión de estilo palaciego y los jardines paisajistas se completaron a finales del S.XVIII y se restauraron bien después de un incendio a mediados de los 90’s. La visita a la propiedad muestra cómo vivían los anglo-irlandeses ricos en el periodo romántico.

Los jardines de Powerscourt son probablemente los más bellos de Irlanda, tanto por su diseño como por su incomparable emplazamiento, a  los pies de la montaña de Great Sugar Loaf. La casa y los jardines fueron encargados por Richard Wingfield, primer vizconde de Powerscourt, hacia 1730. Los jardines se fueron deteriorando hasta que, en 1840, se recuperó el diseño original. Entre 1858 y 1875, el séptimo vizconde ordenó construir nuevos jardines, añadiendo puertas, urnas y estatuas adquiridas en sus viajes a Europa. Tras un incendio accidental en 1974, la planta baja y el salón de baile del primer piso fueron restaurados.          

Glendalough

Después de la visita a estos espectaculares jardines nos dirigimos rumbo a uno de los enclaves monásticos más antiguos de Irlanda: Glendalough. Su visita es gratuita excepto el Centro de Visitantes que es de pago. El  nombre de Glendalough proviene del gaélico irlandés “Gleann dá Locha”, “Cañada de los dos Lagos”; el lago superior, a un corto paseo por el valle fluvial, es mucho más grande que el otro. El lago superior posee el mejor paisaje y los enclaves originales del asentamiento de san Kevin. El lago inferior contiene las ruinas más importantes, como la torre del monasterio (único ejemplo de este tipo que queda en Irlanda), la iglesia de Santa Maria, del S.X, y su diminuta torre circular, y una casa del párroco del S.XII.

Dando un pequeño paseo desde el centro se llega a un cementerio, con una torre cilíndrica en una esquina. Con 33 metros de altura es una de las más interesantes del país.

San Kevin fundó uno de los monasterios más singulares de Irlanda en el S.VI, y hubo monjes estudiando y viviendo aquí hasta el S.XVII. Lo continuos saqueos por parte de los vikingos no impidió que floreciera durante más de 600 años. En 1398 se vio arrasado por las tropas inglesas, pero siguió funcionando como institución monástica hasta la disolución de los monasterios, en 1530.

The Braveheart Drive

Dejamos el idílico paisaje de Glendalough para dirigirnos hacia nuestro destino: Kilkenny. La ruta que nosotros elegimos valió completamente la pena, ya que optamos visitar parte de las montañas de Wicklow, una zona  poco poblada y de escaso tráfico que ofrece exuberantes paisajes, precipicios rocosos, bosques umbríos y turberas teñidas por los tonos morados del brezo, atravesándolas por una de las carreteras más famosas de la zona en dirección del pequeño pueblo de Hollywood: The Braveheart Drive. Esta carretera de unos 80 km de distancia se encuentra situada en los escenarios de algunas de las películas más importantes rodadas en la industria cinematográfica de Hollywood, como la oscarizada Braveheart.

Kilkenny

Dejando atrás una corta pero intensa jornada por el sur de Irlanda, llegamos finalmente a nuestro destino, Kilkenny. Eran ya las 17h aproximadamente y la noche nos llegó acompañada de una ligera y constante lluvia. Llegamos a nuestro hotel situado justo en el extrarradio del centro, Kilkenny House Hotel.

Aunque parezca un B&B es realmente un cómodo y cercano hotel. El recepcionista fue muy amable y estuvo especialmente atento a nuestras peticiones. Si hay algo que se caracteriza Irlanda, entre otras muchas cosas, es por su gente. Nunca otro lugar os tratará tan bien como los locales de esta hermosa isla.

Hasta aquí nuestra primera e intensa jornada por el sur de la República de Irlanda. En la próxima entrada conoceréis el baluarte de los reyes de Munster, Rock of Cashel y el castillo de Cahir, entre otras joyas de la arquitectura irlandesa.

Texto

Virginia Leal

Fotografías

Virginia Leal © 2015